El Banco de Tiempo (BdT) es una iniciativa que intenta crear una red de intercambio de tiempo y de servicios entre las personas de una misma comunidad. Esta iniciativa quiere reforzar el sentimiento de vecindad y crear una red de auto ayuda entre ellas.
Son grupos de personas que intercambian tiempo, lo dedican a realizar actividades puntuales fomentando que las personas se conozcan y confíen las unas en las otras. Las actividades están enfocadas para cubrir necesidades de la vida diaria, la unidad de intercambio es la hora, independientemente del servicio que se ofrezca o que se reciba. Todas las actividades tienen el mismo valor, todo vale el tiempo que se tarde en realizar.
Cada persona que participa en el Banco dispone de un talonario, que utilizará en cada momento que use su tiempo a favor de otra persona.
Se trata de fomentar en la comunidad la cooperación entre mujeres y hombres, entre las distintas personas que forman parte de una misma comunidad, entre las personas mayores y jóvenes y favorecer la integración de grupos, minorías, colectivos con dificultades de inserción en la vida social...
Un banco de tiempo es un sistema de intercambio de servicios por tiempo. En él la unidad de intercambio no es el dinero habitual sino una medida de tiempo, por ejemplo el trabajo por hora. Es un sistema de intercambio de servicios por servicios o favores por favores. Propone la ventaja de fomentar las relaciones sociales y la igualdad entre distintos estratos económicos. Se plantea el uso de este tipo de economía para solucionar diversos problemas presentes en la economía de mercado, a modo de economías complementarias o mercados alternativos. Actualmente estos proyectos pueden ser potenciados con el soporte de la tecnología de la información.
Imaginemos, por ejemplo, que ciertos individuos, no estando necesitados de dinero, lo estén de tiempo y estuvieran dispuestos a pedir un préstamo en términos de tiempo. De este modo, al igual que en los sistemas financieros tradicionales, existiría un trasvase (en este caso de tiempo), desde las unidades superavitarias a las deficitarias, a cambio de una cierta rentabilidad por supuesto, pagada en unidades monetarias o temporales, según el caso.